Cómo conseguir que a tu hij@ le guste leer
El gusto por la lectura va acompañado de buenas noticias:
A través de la buena lectura se asimilan los buenos valores. Desde lo peligroso que resulta desobedecer a una mamá, cuento de Caperucita al valor de la amistad y la lealtad, saga de Harry Potter.
Tener el hábito lector es una de las características infantil que más se asocia al éxito escolar. Esta característica aparece en todos los estudios sobre la lectura infantil y juvenil.
La buena literatura desarrolla:
El vocabulario y gracias a un extenso vocabulario se desarrolla mejor el razonamiento, porque para pensar necesitamos las palabras y la expresión oral por la misma razón.
¿Y cómo conseguimos algo tan bueno? A continuación, damos un decálogo que también aparecen en todas las investigaciones sobre lectura.
1º Tiene que haber libros adecuados cerca del niño. Actualmente se pueden conseguir libros muy baratos y siempre los podremos encontrar gratis en los préstamos de las bibliotecas.
2º Es muy importante que nos vean leer.
3º Empezar a leerles cuentos y enseñarles las ilustraciones desde muy pequeñitos.
4º Conocer sus gustos para ofrecerles libros que les resulten atractivos.
5º Informarnos de los múltiples libros que hay para su edad. Los bibliotecarios y los libreros son muy buenos consejeros.
6º Leer sus libros para poder hablar sobre ellos.
7º Si no le gusta leer, hablar con su profesor para comprobar si tiene algún problema. Son muy frecuentes los problemas lectores y una vez detectados, tienen muy buena solución
8º Encontrar tiempo para leer un ratito casi todos los días.
9º El tiempo para leer se debe llevar a cabo en un sitio tranquilo, que no haya estímulos electrónicos.
10º Un momento excelente es antes de dormir
Ideas que pueden ayudar a elegir colegio
Hemos recogido experiencias de personas que han acertado al elegir colegio para sus hijos y las queremos compartir. En vuestros comentarios podéis añadir las que os han ido bien o las que os hayan dicho personas cercanas.
Conocer el ideario y que esté de acuerdo con vuestros principales principios. Un colegio con buena fama que no se adapte a lo que esperáis, no va a cambiar y hace sufrir.
Los días de Puertas abiertas, debido a la pandemia, ya no son de libre acceso y hay que pedir cita. Conviene hacerlo y llevar una lista de preguntas para que no se nos olvide nada.
Ejemplos de preguntas que nos pueden ayudar:
¿Cuál es el Proyecto Educativo?
¿Hay periodo de adaptación? ¿Cuál es el horario?
¿Cuántos alumnos hay en clase?
¿Cómo evalúan día a día?
¿Ofrecen ayuda si el niño/a tiene algún tipo de problema?
¿Qué idiomas se enseñan?
¿Cuál es el nivel tecnológico?
¿Qué clases extraescolares tiene?
¿Hay horario extra para los padres que por trabajo tienen que dejarles antes o recogerles después?
¿Qué deportes se practican?
Intentar enterarnos:
La autoridad del profesor/a
El ambiente de clase
La participación de los niños/as
Participación de los padres
Se valora:
Los colegios que están cerca del domicilio tienen muchas ventajas: ganas tiempo en llevar, recoger, reuniones, toda la familia duerme más, los amigos están cerca.
Conviene:
Ver la página web del colegio
Hablar con padres del colegio. Nos podemos enterar si hay un chat de padres, o acudir un día al parque más cercano al colegio donde seguro que muchos se quedan un rato a la salida.
Ver listados de colegios de alta calificación según distintas puntuaciones y cualificaciones.
Tener en cuenta:
La personalidad de nuestro hijo. Debemos escoger el colegio que más se adapte a sus características.
El horario y el tipo de jornada (continua o no).
La cantidad de idiomas que enseñan, si es bilingüe o no.
Si necesitamos que se quede a comedor, debemos preguntar por el tipo de comida, si la hacen en el colegio o la llevan, si se adaptan a alergias o intolerancias alimentarias, etc…
Si ofrecen actividades extraescolares y de qué tipo, y a qué precios.
Buscador online:
En este buscador puedes encontrar la información básica de todos los colegios de nuestro país.
Más información:
Sapos y Princesas: https://saposyprincesas.elmundo.es/consejos/educacion-colegio/las-8-claves-para-elegir-el-mejor-colegio/
El listado de España El Mundo: https://www.elmundo.es/mejores-colegios.html
El listado de Madrid ABC: https://www.abc.es/familia/educacion/colegios/abaco/88532/
¿Cómo acertar con los regalos de Navidad?
En primer lugar, habrá que decidir si se manda la carta a Papá Noel o a los Reyes Magos.
Los regalos de Papá Noel tienen la ventaja de que los podemos utilizar durante las vacaciones, por lo que suelen tener éxito son los que son fáciles de usar y no necesitamos a los mayores. Por ejemplo:
-Libros
-Juguetes simbólicos: muñecos, coches, construcciones sencillas, disfraces…
-Manualidades sencillas: cuaderno para dibujar o colorear, plastilina…
Para los Reyes Magos son muy buenos los juguetes a largo plazo, que son los juguetes más complejos y que se necesita un adulto, por ejemplo:
Grandes construcciones
Trenes
Juegos de mesa
Juguetes didácticos
Libros que necesitan ser leídos
Deportes
Juegos cooperativos
Los juegos de videoconsolas y todo lo relacionado con las nuevas tecnologías, aunque tengan mucho éxito, no los podemos aconsejar y más después de que nuestros niños han utilizado bastante las tabletas y los ordenadores durante los confinamientos. Creemos que son regalos a más largo plazo, y si los trae Papá Noel, es conveniente dosificarlos para que no se produzcan consecuencias negativas: no querer jugar con juguetes reales, enfadarse cuando llega el momento de cerrar el dispositivo, adicción o querer usar siempre el dispositivo…
Como reglas generales ofrecemos las siguientes:
Aconsejar, pero la elección final es del niño y debe cumplirse. Más vale un regalo deseado que muchos no queridos.
Poner límite al número de juguetes. Si tienen muchos regalos al final no produce tanta ilusión y se pierde la capacidad de desear.
Antes de escribir la carta, pasear por alguna tienda, ver catálogos y comentarlos.
Pedir en la carta algún juguete para regalar a otro niño.
Realizar todos los protocolos previos: seleccionar los juguetes, escribir la carta, entregarla, preparar la llegada de Papá Noel o de los Reyes Magos.
Tolerancia a la frustración
La frustración es el sentimiento negativo que nos aparece cuando algo sale mal.
La reacción infantil cuando aparece la frustración es la pataleta, por ejemplo, cuando quieren que se les compre algo y se les dice que no. Es muy normal que, desde las primeras edades, ante esta situación se produzcan lloros, gritos, tirarse al suelo. Estas reacciones básicas van dirigidas a intentar conseguir lo que se quiere y suelen aumentar la intensidad si se dan cuenta que son efectivas. Otro tipo de reacción es venirse abajo, abandonar, encerrarse en sí mismo.
Las frustraciones más frecuentes son:
· No conseguir lo que se quiere
· Realizar mal una actividad
· Perder en deporte y juegos
Ante las malas conductas cuando aparece la frustración están las buenas conductas que tienen que aprenderse desde los primeros años y una vez adquiridas se realizan sin esfuerzo.
Las malas conductas conllevan sufrimiento, mientras que las buenas nos hacen sentir bien.
No podemos cambiar las malas circunstancias, pero sí cómo vivirlas sin que lo pasemos mal.
Albert Espinosa en su último libro nos dice que si nos enseñaran a perder ganaríamos siempre (Grijalbo), y tiene razón. Hay que saber que no siempre las cosas salen como nos gustaría sirve para que, cuando se tuercen, sepamos afrontarlas de forma positiva y buscar soluciones. De esta manera se sufre menos. Todo esto es muy bonito en teoría, pero cómo se puede llevar a la práctica. A continuación, ofrecemos algunas ideas prácticas para conseguirlo:
· Conocer cuanto antes nuestras limitaciones. Si no se da bien jugar al fútbol no enfadarse si no se meten goles y aprender a jugar para divertirnos.
· Presentar a los niños modelos positivos, por ejemplo, Rafa Nadal cuando pierde un partido. Compararlo con modelos negativos para que decidan cuál les parece mejor y se quieran identificar con él.
· Leerles cuentos con personajes que sepan controlar bien la frustración.
· Realizar dramatizaciones de situaciones de la vida cotidiana con típicas frustraciones y comportamientos adecuados.
· Comentar situaciones que han vivido mal y analizar desde su nivel por qué no se ha gestionado bien.
· En casos de rabietas, grabarlas para que, pasada la situación y en frío, vean que no es el comportamiento adecuado.
· En caso de hundimiento, buscar entre todos las soluciones más convenientes en cada caso, por ejemplo, si ha fracasado en algo que tiene posibilidades de salir bien, animar para que sea perseverante; en el caso que es imposible que salga bien y sufre por ello, buscar alternativas que siempre las hay.
Cómo evitar miedos en la Pandemia
Hemos recibido algunas consultas de padres porque sus hijos han desarrollado miedos a partir del Coronavirus, así que vamos a intentar contestaros y ayudaros con este post.
Estos miedos y pesadillas son normales debido a que los peques están expuestos a todo tipo de noticias y comentarios sobre el virus y, además, han experimentado no poder salir de casa, ni ir al colegio.
Todos estos miedos son normales y se pueden superar fácilmente con los siguientes
Consejos:
Para expresar sus miedos
−Que nos cuenten ellos lo que saben y sus experiencias.
−Proponerles que hagan un dibujo sobre lo que sienten.
En los casos que ha habido fallecimiento de personas cercanas, es muy importante que lo verbalicen y expresen sus sentimientos.
Para ayudarles a superarlos
A partir de lo que nos cuenten, podemos utilizar diversos recursos. Ponemos algunos ejemplos.
Explicarles la pandemia con palabras que puedan entender.
Contarles un cuento sobre el tema. Por ejemplo:
Cuento del coronavirus
A María y a Pablo sus papás les explicaron que había un bichito tan pequeño, tan pequeño que no lo podíamos ver. Teníamos que lograr que no se metiera dentro de nuestro cuerpo y para eso era fundamental lavarse las manos antes de comer cualquier cosa. Les enseñaron a lavarse las manos muy bien, les pusieron pintura de dedos y les gustaba mucho ver que si se las lavaban por arriba y por debajo la pintura iba desapareciendo, tenían que insistir la que veían entre los dedos. Por último, con un cepillito, también eliminaban la pintura que tenían en las uñas.
También les enseñaron a usar la mascarilla cuando estaban con otras personas. Salieron todos a comprarlas. Después, en casa, se disfrazaron, Pablo de médico y María de astronauta y hicieron todo tipos de pruebas para hablar con la mascarilla, hablaban a gritos, cantaban, hacían distintos ruidos…
Con cuentos de este tipo se puede explicar lo que estamos viviendo y dar ideas. Con un tipo de guion similar, se pueden hacer distintas adaptaciones, por ejemplo, si los niños son pequeñitos, los personajes pueden ser animales. También les apasiona que los protagonistas se llamen como ellos.
Además, nos permiten hacer dramatizaciones.
Recomendaciones de libros sobre el coronavirus
Los libros son siempre una gran ayuda para poder explicar un tema difícil. Por eso os recomendamos los siguientes sobre el tema de la Pandemia.
Presentamos dos de ellos:
Hello Kitty cuida su salud
A PARTIR DE 3 AÑOS
Autor/a Isabel Carril Martínez
Ilustrador/a Alberto de Hoyos
Un magnífico libro interactivo para que los más pequeños aprendan y aprecien los hábitos saludables básicos: sueño, higiene, alimentación, deporte, etcétera. Al final incluye un taller con explicaciones y consejos para reforzar los hábitos.
Precio:
El cuento Alicia y el coronavirus aborda la historia de una niña que no entiende por qué no puede salir de casa, pero su padre le cuenta de forma amena y pedagógica qué es el coronavirus y el porqué del confinamiento, a la vez que disipa sus miedos con sus explicaciones. "Es un libro corto, pero claro sobre qué es el coronavirus", indica la escritora de libros infantiles Meritxell Margarit, autora de El meu millor no amic y El tesoro del cálao.
Si el miedo impide hacer la vida
cotidiana, el peque no puede dormir, se niega a salir o a ir al colegio, es el
momento de consultar a un especialista.
Puntos importantes para
tratar en las reuniones con los profes
¡Hola! ¡Ya estamos de nuevo aquí con vosotros! Este va a ser un curso algo diferente, pero todos tenemos mucha ilusión por empezar de nuevo el cole, ¿a qué sí?
Seguro que a vuestros peques les ha encantado reencontrarse con sus amigos y con sus profes, aunque sea con las medidas de SEGURIDAD tan necesarias que todos tenemos que tomar.
Como esta vuelta al cole es un poco más especial que otras, seguramente todos estemos un poco más nerviosos, y cuando tengamos una tutoría con los profesor@s de nuestros hijos, puede ser que no la aprovechemos todo lo que podemos.
Por eso hemos pensado daros algunos consejos para que la tutoría os resulte una experiencia enriquecedora y os ayude a estar en sintonía con los profes, algo fundamental para la educación de nuestros peques.
Una vez que solicitéis la tutoría u os la solicite el tutor o tutora, es el momento de pensar qué queremos tratar. Depende de cada peque y de cada familia, pero es importante saber cómo es su comportamiento en clase (si está atento, si colabora, si participa, si es muy callado o muy hablador, si respeta las normas, si tiene amigos, como es la relación con sus amigos, etc...), con qué podemos ayudar en casa respecto al aprendizaje del colegio (aportarle los recursos para que pueda hacer los deberes, fomentar juegos educativos, fomentar la lectura, etc…) y cómo podemos mejorar las rutinas o los hábitos de nuestro peque para facilitarle la adaptación al estudio y el aprendizaje.
Si en casa tenemos alguna situación especial: una separación, un cambio de casa, un nuevo hermanito… es importante comentárselo al tutor, ya que algunos comportamientos pueden ser consecuencia de la adaptación de los peques a estas nuevas situaciones.
Por supuesto, aprovechemos para conocer el estado emocional en el que se encuentra el peque en el colegio, y contarle al tutor el que tiene en casa, a veces una diferencia substancial entre ambos puede ser síntoma de algún problema y siempre es importante conocerlo.
Y ya, a nivel práctico, algo muy obvio: Ser puntuales. Los profesores tienen un tiempo limitado para las tutorías, a veces convocan a dos familias el mismo día para poder atender a los padres y madres. Así que, si llegamos tarde, es una falta de respeto hacia el tutor y hacia las otras familias, además de estar siendo un mal ejemplo para nuestros hijos. Incluso, es posible que el tutor@ se ponga nervioso, nosotros también y la reunión comience con un clima de tensión que no nos interesa. A veces el retraso puede ocasionar que la reunión no se celebre.
Os invitamos a que intentéis mantener un tono cordial durante la reunión. Los profesores solo quieren informarnos sobre nuestros hij@s y ayudarnos con su educación. Recordad que ellos pasan muchas horas juntos y les llegan a conocer muy bien, por lo que sus aportaciones siempre serán muy necesarias y conviene estar abierto a escucharlas.
Si el tutor nos dice algo que nos molesta, lo podemos comentar sin enfadarnos. Exponer nuestro punto de vista con calma porque comportándonos impulsivamente no se logra nada y dificulta la relación.
Tened siempre en mente que los profes y los padres formáis un equipo, en el que todos queréis lo mejor para vuestros peques.
Mejorar la
comunicación al salir del cole
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